Triste empate en el Gallardón.

Los Andes e Independiente de Mendoza, igualaron 1 a 1 ayer, en Lomas de Zamora, en el marco de la vigésimo quinta fecha del torneo de la B Nacional.

Mucha gente se acercó al Estadio Eduardo Gallardón ayer, donde a partir de las 18:20, se enfrentaron un necesitadísimo Los Andes, y un Independiente de Rivadavia, que aún no sabe que papel juega en el torneo.
Los once que paró en el terreno de juego Luís Blanco fueron: Walter Cáceres; Sergio Bogado, Nicolás Foglia, Mariano Sardi; Javier Bergés; Cristian Vega, Gonzalo Bustamante, Marcos Brítez Ojeda, Gastón Montero; Alberto Yaqué y Juan Martín.
Por su parte, Jorge Ribolzi, envió al terreno de juego a Nahuel Guzmán; Matías Mantilla, Sebastián Brusco, Osvaldo Barsottini; Sebastián Romero, Ariel Coudannes, Luís Solís, Ariel Seltzer; Ariel Ortega; Luís Tonelotto y Diego Caballero.
En el primer tiempo, el Mil Rayitas atacó hacia el arco que da espaldas a la nueva tribuna cabecera sur.
Los primeros minutos transcurrieron sin llevar peligro a las áreas defendidas por Cáceres y Guzmán. Solo hubo insinuaciones, y la pelota transitaba por el sector medio del terreno de juego.
El desarrollo no contagiaba para nada, pero a los 19 minutos, se abrió el marcador a favor del Mil Rayitas. Una pelota aérea, derivó tras una serie de cabezazos en las piernas de Guzmán, quien no pudo controlarla, y cuyo rebote favoreció la entrada del enorme “Beto” Yaqué, quien se la llevó de atropellada, y terminó cabeceando sin resistencia.
Un gol a lo goleador, para celebrar los 20 años de trayectoria en primera división. ¡Grande “Beto”, seguí rompiendo redes!
El nivel futbolístico decayó notablemente. No se registraron llegadas en favor de ninguno de los dos, y se repartieron durante varios minutos la posesión del balón.
Recién a los 35`, se registró una nueva llegada en favor del equipo mendocino. Tras un muy buen centro enviado por Ariel Ortega, Diego Caballero cabeceó sin resistencia, y obligo a una enorme intervención de Walter Cáceres. ¡Nos salvamos!
A los 47`, ya cerrándose la etapa inicial, un remate fortísimo fue desviado por “Cubito” Cáceres, y el rebote encontró a varios jugadores de Independiente fuera de juego. Una chance clarísima para la visita, que afortunadamente no fue capitalizada.
Así se cerró el telón del primer acto en Lomas de Zamora, una etapa en la que predominaron los pelotazos a las áreas, sobre todo en búsqueda de la presencia goleadora de Luís Tonelotto, pero que por suerte, se encontraron con la gran actuación y seguridad de Walter Cáceres.
En el segundo tiempo, Los Andes salió con todo a buscar engrosar el marcador, esta vez, atacando hacia el arco que da a la calle Portela. Las oportunidades no tardaron en llegar.
A los 3 minutos, Vega envió un centro llovido de espaldas al área. Yaqué la luchó y perdió contra su marcador, pero el rebote derivó nuevamente en los pies de Cristian Vega, quien remató fuerte y cruzado. Lamentablemente se fue muy cerca.
A los 4`, Javier Bergés, de muy buen rendimiento, envió un pase para la corrida del “Beto”, este envió el centro, y el cabezazo posterior de Juan martín encontró muy bien parado a Guzmán.
Dos minutos después, Martín ganó con el cuerpo una pelota pegada a la línea lateral izquierda del ataque mil rayitas, y envió un centro complicadísimo para el arquero. Tras lucharla entre Yaqué y Bustamante, el cordobés remató de zurda, y la pelota se fue junto al poste derecho del “uno” mendocino.
A los 18`, un buen remate de Yaqué encontró muy bien parado a Guzmán.
Sí, fue una ráfaga tremenda de buenas oportunidades de gol para el Mil Rayitas. Pero, tal como lo señala el viejo dicho: Los goles que se pierden en el arco contrario…
A los 19`, tras un tiro de esquina, la pelota rechazada por Fóglia fue a dar en las cercanías de Luís Tonelotto, quien de espaldas al arco, con un toque sutil, colocó la pelota junto al palo derecho de Cáceres. Una verdadera pena, pero a decir verdad, fue un golazo.
El resto estuvo decididamente de más. Solo un par de contras a favor de los visitantes, que afortunadamente no estuvieron finos para la estocada final.
El Mil Rayitas tampoco supo sacar provecho de los tres expulsados que tuvo la “lepra” mendocina, y el partido fue un justo empate.
Fue el debut sin pena ni gloria de Luís Blanco. Se viene Chacarita, partido que se quiere ganar sea como sea. Esperemos que la suerte nos acompañe en una bravísima parada que tendremos el viernes por la noche en terreno funebrero.